
Kill Covid - 19
COVID-19 está transformando nuestras vidas. Podríamos enmarcar esta enfermedad rindiéndonos al desastre o esforzándonos por superarlo. Sugerimos que la pandemia está convirtiendo a “algunos” ciudadanos en actores devotos, individuos conectados visceralmente – fusionados – a un grupo que comparte un valor sagrado. Dado que los actores devotos están dispuestos a hacer sacrificios costosos por sus compañeros y convicciones, el virus, en lugar de “matarnos”, bien podría hacernos más fuertes. Estamos juntos en esto.
Hoy en día, el mundo se enfrenta al desafío global más importante desde la Segunda Guerra Mundial, la enfermedad del Coronavirus (COVID-19). Cuando nos enfrentamos a amenazas de este calibre, tenemos dos alternativas: sucumbir ante la amenaza, deprimirnos y simplemente esperar a que todo suceda, o afrontar el desafío reforzando nuestros lazos con los más cercanos, extendiendo estos lazos a otras personas y también. fortaleciendo nuestras convicciones sobre algunos valores particulares que se vuelven sagrados. La forma en que estamos enmarcando la pandemia, al dar expresiones continuas a las acciones y rituales colectivos, como aplaudir todos los días desde nuestros balcones, es una clara indicación de que la mayoría de la gente ha optado por el segundo curso de acción.
En resumen, que hay que conseguir matar al COVID y todo lo que éste representa; que es un buen momento para hacer una exhibición de lo mejor de nosotros mismos; que es hora de priorizar de otra manera, los parámetros actuales no son los de hace un año y por tanto ya no sirven, necesitamos priorizar de forma diferente; que necesitamos un chute en vena de criterio para formar nuestra propia opinión y así tomar las mejores decisiones.
Y qué tenemos que recordar, que solo tenemos el presente, estamos juntos en esto.